¿Estás realmente hambriento, en una situación donde existen malestares estomacales y ruidos intestinales ó es un antojo de una comida puntual?
¿Qué te lleva a comer de mas? Hay que poner el nombre y apellido a esa emoción que desencadena comer aunque uno esté satisfecho. ¿Es aburrimiento? ¿Enojo o preocupación por una situación particular? ¿O se desea comer mas sólo por verlo y “porque está ahí”? ¿Realmente tenés hambre real ó es esa emoción que aparece?
Si te dan ganas de comer un chocolate, un alfajor, un sándwich de miga, come solo una porción y disfrutalo! Si las porciones son mas abundantes y ese tipo de alimentos poco saludables se consumen todos los días, plantéate si es hambre real o hambre emocional.
Si realmente es HAMBRE REAL entre comidas, te dejo opciones de snacks saludables:
- Fruta fresca
- Frutos secos como nueces, almendras, avellanas, castañas de cajú, maní sin sal
- Bastones de verduras crudas como zanahoria, apio, pepino
- Yogur descremado
- Porción de queso descremado
- Postre de leche light
- Fiambres magros como jamón cocido natural, lomito o pastrón
- Huevo duro o revuelto en sartén con condimentos como orégano, pimienta, ají molido
Si es HAMBRE EMOCIONAL, el ceder ante el placer momentáneo, nos genera seguir en éste círculo de frustración, ansiedad y sufrimiento.
Hacé el ejercicio de preguntarte si el gusto y el placer que te concedió comer en exceso, era igual que el disfrute de la primera o segunda porción. Si la respuesta es un rotundo NO, podemos afirmar que muchas veces no hay goce en los excesos. ¿Sentiste culpa o satisfacción luego de ese atracón?
¿Tenés hambre real o hambre emocional?
Identificarlo es un gran paso para el descenso de peso y futuro mantenimiento!
LICENCIADA EN NUTRICIÓN ANAHÍ HEDED