En Australia, cerca a la ciudad de Exmouth al norte de Perth, y en una de las campañas de investigación de las que Agustín participó como invitado por el Department of Primary Industries and Regional Develpment (DPIRD) – Western Australia.
Un marplatense que en Australia investiga tiburones y busca aportar a su conservación, habló en Cosas que pasan.
Desde la ciudad de Perth, en Australia, el biólogo marino Agustín De Wysiecki compartió cómo es el trabajo científico que desarrolla desde hace siete meses en uno de los destinos clave para el estudio de tiburones a nivel mundial.
“Vine en diciembre del año pasado, y la experiencia viene siendo increíble. En Australia hay más de 330 especies de tiburones, rayas y quimeras. Es casi un tercio de las especies que existen en el mundo”, explicó De Wysiecki, quien forma parte de un proyecto financiado por Parks Australia —el equivalente a Parques Nacionales— junto al investigador argentino Matías Braccini.
El objetivo del trabajo es modelar y mapear la distribución de todas las especies de peces cartilaginosos en aguas australianas, para evaluar el grado de protección que ofrecen las áreas marinas protegidas. “Es un proyecto muy ambicioso, con más de 30 personas involucradas. Estoy en contacto con investigadores que leí toda mi vida y hoy puedo conocer personalmente”, contó.


La pasión por el mar desde Mar del Plata
Agustín estudió Biología en la Universidad Nacional de Mar del Plata, donde se especializó en ciencias marinas y realizó su tesis sobre el gatuso, muy conocido, apreciado y degustado en la costa atlántica. Continuó su formación con un doctorado en Puerto Madryn enfocado en los tiburones predadores tope de la Argentina: el cazón, la bacota, el escalandrún y el gato pardo. “Son especies grandes, migratorias y cumplen un rol clave en la cadena trófica”, explicó.


Sobre la situación de estas especies en Argentina, fue claro al sostener que “están en declive, algunas poblaciones han disminuido hasta un 80 por ciento respecto de décadas pasadas, especialmente por la sobrepesca. Hay una responsabilidad importante de tomar medidas para revertir esto”.
“El tiburón no es lo que muestran las películas”
Consultado sobre la influencia cultural de películas como Tiburón, de Steven Spielberg —que recientemente pidió disculpas por el temor que generó—, Agustín fue categórico:
“No hay nada en esas películas que refleje la realidad de estos animales. Son parte del ecosistema, no monstruos. La mayoría son inofensivos si no se los provoca.”
De hecho afirmó que los ataques a humanos son extremadamente raros.
“La estadística muestra que el riesgo es mínimo”, dijo.
También subrayó que bajo la palabra “tiburón” se engloban especies muy diversas, desde grandes predadores hasta filtradores inofensivos como el tiburón ballena.


Trabajo de campo
Si bien su investigación actual no requiere contacto directo con tiburones, De Wisiecki participó en dos campañas científicas en altamar, donde se capturan, identifican, marcan y muestrean ejemplares para estudios genéticos. “Fue una experiencia fascinante, estar a bordo durante dos semanas sin ver la costa, trabajando con animales que hasta ahora solo había estudiado en papers”, relató.
Sobre el acercamiento de tiburones a la costa
Sobre teorías que plantean un mayor acercamiento de tiburones a zonas costeras, sostuvo que no hay una única causa:
“Puede deberse a la sobrepesca en zonas alejadas que los obliga a buscar alimento más cerca de la costa, pero no se puede afirmar como una regla general.”
Agustín De Wisiecki, investigador del CONICET, seguirá en Australia al menos dos años más, trabajando en uno de los proyectos más ambiciosos sobre conservación marina.