El exconcejal y referente histórico del PRO, Roberto Fabiano, opinó en Cosas que pasan sobre el rechazo del proyecto de ficha limpia en la Cámara de Diputados, una iniciativa impulsada por la legisladora Silvia Lospennato que buscaba impedir que personas con condenas judiciales firmes pudieran integrar listas electorales.
“Es lamentable que debamos recurrir a una ley de ficha limpia para que corruptos no formen parte de listas. Ya es casi vergonzoso tener que llegar a este recurso”, expresó Fabiano. Y fue más allá: “Más vergonzosa aún es la resistencia: los que votan en contra son justamente los que quedarían excluidos si se aprueba”.
El dirigente, actualmente alejado de la actividad política activa, pero aún ligado al espacio desde lo fundacional, apuntó a la responsabilidad ciudadana: “La ficha limpia debería estar en manos del ciudadano. A la hora de votar tenemos que elegir listas con menos nivel de corrupción declarada”.
En ese sentido, agregó que “no se trata de denuncias, que muchas veces son operaciones políticas, sino de personas con doble condena ratificada por Cámara. Esa gente no debería participar”.
Fabiano también hizo una comparación directa con el acceso a empleos públicos: “Un empleado municipal de recolección necesita certificado de antecedentes. Pero un condenado por corrupción puede ser diputado, senador o presidente. Es ridículo”.
Por último, se refirió a su salida de la política activa: “Cumplí un ciclo. La política no debería ser un medio de vida. Creo en la alternancia, en gente joven que se involucre, y en los mayores acompañando desde la experiencia”.
Fabiano consideró que será muy difícil que la ley prospere en el Congreso tal como está hoy conformado. “Los políticos no se van a autoexcluir nunca. Mientras tanto, somos los ciudadanos quienes podemos aplicar ficha limpia desde el voto”, concluyó.