En Cosas que pasan, Raúl Valladares, integrante de la Comarca del Río Quequén Salado, brindó un panorama sobre la situación del río a la altura del balneario parque de Micaela Cascallares.
“Durante la tarde y la noche de ayer (lunes) estuvo prácticamente desbordado, pero hoy bajó unos 30 centímetros”, informó Valladares. Pese a la leve mejora, el sector sigue comprometido y la Municipalidad de Tres Arroyos trabaja en la contención del agua con material aportado desde Micaela Cascallares.






Uno de los puntos afectados es el camino de Irene, que quedó intransitable en un tramo de aproximadamente 1.200 metros debido a la fuerte correntada. Sin embargo, Valladares explicó que este desborde es un fenómeno habitual: “Es como un bypass natural que hace el río. Se desborda, pasa por una alcantarilla de la vía y vuelve a encauzarse más adelante”.
La situación en la región dependerá del caudal de agua proveniente de otros distritos. “Han caído entre 400 y 430 milímetros en la cuenca alta del río, y eso impacta en toda la zona”, advirtió Valladares, quien también manifestó preocupación por el estado del puente viejo de Oriente y la represa.
Desde las delegaciones de la región, como la de Reta, se enviaron materiales y maquinaria para reforzar los terraplenes y minimizar el impacto del agua.