En Cosas que pasan, la nutricionista Anahí Heded destacó la importancia de desvincular la salud nutricional de la balanza.
Con un enfoque “no pesocéntrico”, explicó que el bienestar no se mide únicamente en kilogramos, sino en indicadores como el nivel de energía, el rendimiento físico, la calidad del sueño y el estado digestivo. “Una persona puede no ver grandes cambios en el peso, pero experimentar una mejora en su energía y en su digestión. Eso es un signo de progreso,” señaló.
Subrayó además que estos aspectos contribuyen a un bienestar integral.
Para Anahí un tratamiento nutricional debe reflejarse en mejoras de calidad de vida y en cambios sostenidos de hábitos, en lugar de enfocarse en resultados inmediatos en la balanza.
Este proceso, explicó, genera un descenso de peso como consecuencia natural, pero no como fin en sí mismo.
En un mundo donde el peso tiende a ser una obsesión, su enfoque propone valorar los cambios que permitan vivir de forma plena y saludable, y replantear el cuidado de nuestra salud más allá de los números.
