Desde el municipio confiaron a Cosas que pasan que se intervendrá “de oficio” ante reiteradas denuncias de vecinos por una fiesta clandestina desarrollada entre la noche del sábado y madrugada del domingo en un domicilio de avenida Güemes entre el 1600 y el 1700.
Tras numerosas quejas de vecinos, inspectores municipales y policiales se hicieron presentes, sin poder desactivar la juntada de jóvenes que superaba ampliamente lo tolerado por las normas sanitarias, en contexto de pandemia por coronavirus en la actual fase 4.


Superados en número, inspectores y efectivos, no pudieron clausurar el evento; pero en consecuencia autoridades del sector aplicarían una contravención -multa- para con los responsables del inmueble.