Tras la crisis que pudo haber terminado con el tradicional frigorífico tresarroyense, los trabajadores miran con esperanza el futuro después de su reapertura.
Emiliano Arana, es un trabajador del área de corrales, la primera línea de trabajo, y compartió la experiencia que debió transitar durante los últimos largos meses hasta la reapertura de la empresa.